Apartheid Soneto


Un soneto especialmente relevante en el amplio repertorio de Araujo (1988). Las 14 líneas de cercado metálico siguen la estructura estrófico versal del soneto tradicional –dos cuartetos y dos tercetos-. Formalmente el autor también presta una gran atención al ritmo del soneto tradicional que en este caso se expresa en los nudos del tendido eléctrico,.Temáticamente el título en relación con la imagen gráfica del poema denuncia el apartheid y visualmente se denuncia cualquier forma de represión de las libertades del individuo.


LA LEYENDA DE HUASCARÁN Y HUANDOY,
LEYENDA DE LOS YUNGAS (PERÚ)


En el reino de la sierra de los Andes, en el valle del Callejón de Huaylas vivían los dioses. El dios supremo, Inti (el sol) tenía una hija llamada Huandoy.
Huandoy era tan bonita como una tierna y fresca orquídea. Su padre pensaba casarla para toda la eternidad con un dios de su belleza similar y sus mismas virtudes. Pero en el corazón del valle, en el poblado de los Yungas, vivía un gentil y valiente príncipe mortal, llamado Huascarán, que se enamoró profundamente de la bonita Huandoy. Ella correspondía al amor del príncipe. Se encontraban a escondidas, eran felices y sentían una gran pasión y ternura el uno por el otro.
Cuando el dios padre se enteró de los amores entre su hija y el príncipe mortal, le suplicó que le dejase, que vivir con un príncipe mortal no era conveniente para una diosa. Pero la pasión de los jóvenes era superior a las súplicas del padre, a sus consejos y sermones.
Tan grande fue la rabia que sintió el dios supremo, Inti, ante la fuerza del amor de su hija con un mortal que maldijo esta relación y les condenó hasta la eternidad a vivir separados. Les convirtió en dos grandes montañas de granito y las cubrió de nieve perpetua para calmar su ardiente pasión. En medio de las dos montañas situó un valle estrecho y profundo para que estuviesen totalmente aislados. En su furia, el dios padre, elevó las montañas a una altura majestuosa, con el fin de que los príncipes se pudiesen ver pero nunca más se llegasen a tocar.
Los enamorados lloran su dolor, funden gota a gota la nieve que les cubre y sus lloros de amor se unen en un lago de color azul turquesa para toda la eternidad.
Luis Rodríguez Ortiz. Llegenda dels yungas de Yungay -Ancash- (Perú). Traducido del catalán y adaptado por Manuel Chico Morales (CP Miralvalle). Fuente: Contes d'arreu del món. Edició a cura de Carme Martín, Francesc Ricart i Alfons Vila. Columna 1995. [Servei d'Ensenyament del Català, Ajuntament de Manresa].